¿Alguna vez te has parado a pensar en la publicidad que se esconde tras la gran pantalla del cine? En TBO Consulting estamos continuamente en reciclaje para ofrecer a nuestros clientes lo mejor y con las tecnologías más avanzadas. ¿Pero te has parado a pensar en cómo llevan a cabo la publicidad dentro de los cines? ¿No te resulta curioso? Hoy te lo contamos en profundidad.
Publicidad en las grandes pantallas del cine
Son muchos los usuarios que se quejan de que las películas en el cine nunca empiezan a la hora que indica la entrada. Normalmente, si pone a una hora, podemos calcular que tarda entre 15 y 20 minutos más en empezar. Durante este tiempo, no solamente están emitiendo estrenos recientes (tráilers de películas), sino que en muchos casos nos meten anuncios de publicidad por medio.
Si lo extrapolamos a lo que ocurre cuando ponemos la TV en casa, no debería extrañarnos, porque cada vez que estamos viendo un programa o una película nos topamos con decenas de anuncios cada cierto tiempo. ¡Es un sin vivir! Sin embargo, podemos “perdonarlo” de alguna manera, porque los canales de TV que obtenemos a través del TDT son gratuitos (a excepción de los de pago), y si hay anuncios, tenemos que asumirlo, ¿pero qué pasa con los cines?
En los cines tenemos publicidad o lo que se conoce como ambush marketing (un marketing “de emboscada” que trata de aprovechar un momento puntual de un evento, como en este caso en el cine, para hacer marketing y captar la atención del usuario de pleno).
Lo mismo ocurre product placement (lo que conocemos como emplazamiento publicitario). Estamos ante una técnica de publicidad que se basa en insertar un producto, marca o mensaje dentro del programa. ¿No te ha llamado la atención ver como en muchas películas aparecen los Mac de Apple como si nada y en otras ocultan la manzana? Pues se trata de esto.
Otro negocio redondo del cine está en los anuncios
No cabe duda de que uno los grandes negocios que giran en torno al cine está relacionado con los anuncios que se emiten antes de empezar la película. Y es que como te decimos, la hora que señala la entrada es el momento en el que se enciende la pantalla. Desde entonces arrancan nuevos trailers, anuncios de por medio… hasta que pasados unos 15 o 20 minutos llega la ansiada película.
Tampoco podemos hacer nada para cambiarlo porque “es lo que toca”. Una alternativa podría ser alquilar la película en casa por otros medios, aunque normalmente llegan meses más tarde respecto al cine, por lo que tampoco es una gran solución. Así que tocará convivir con los anuncios en la gran pantalla.
¿Te habías parado a pensarlo antes? ¿Qué opinas acerca de este tema?